
Un alto funcionario de la Agencia de Inteligencia de Defensa de Estados Unidos ha informado al Congreso que el Ejército chino está desplegando misiles hipersónicos a un ritmo alarmante, lo que representa una amenaza cada vez mayor para los Estados Unidos en términos de ataques nucleares y convencionales.
La capacidad de los misiles hipersónicos de maniobrar hacia objetivos a una velocidad que supera cinco veces la del sonido y evita la detección esto es particularmente preocupante para los funcionarios del Pentágono.

La brecha entre la capacidad de Estados Unidos y la de sus oponentes se ha ampliado en el ámbito de los misiles hipersónicos, y la preocupación es que otros países estén avanzando más rápidamente que Estados Unidos en este ámbito.
China cuenta con una impresionante cantidad de túneles aerodinámicos que se utilizarán para probar misiles hipersónicos, y Rusia también ha desplegado recientemente una variedad de misiles hipersónicos estratégicos.
El tema en cuestión se refiere a los nuevos avances en materia de seguridad de China y Rusia que están alarmando a los Estados Unidos. En particular, se trata del desarrollo de misiles hipersónicos que son capaces de maniobrar hacia objetivos a velocidades muy altas, lo que dificulta su detección y los convierte en una amenaza creciente para los Estados Unidos.
China ha desarrollado y puesto en servicio varios tipos de misiles hipersónicos, incluyendo aquellos que pueden maniobrar hacia objetivos a más de cinco veces la velocidad del sonido, lo que los hace muy difíciles de detectar y rastrear. Según los informes, China ha construido 21 túneles aerodinámicos que van a ser utilizados para probar misiles hipersónicos, lo que indica la dimensión significativa del programa de misiles hipersónicos del país.
Por su parte, Rusia también ha desplegado recientemente tres misiles hipersónicos, llamados Kinzhal y Tsirkon, así como una nueva variante del misil balístico SS-19, que puede volar a más de 24.000 kilómetros por hora. Rusia espera ampliar su arsenal de misiles hipersónicos estratégicos en los próximos años, desplegando planeadores hipersónicos, como el nuevo misil balístico intercontinental Sarmat.
Estos avances en materia de seguridad de China y Rusia han generado preocupación en los Estados Unidos, ya que el país está atrás en el camino del desarrollo de misiles hipersónicos y se preocupa de que no esté haciendo lo suficiente para acortar la brecha. Los misiles hipersónicos podrían reducir el tiempo de ataque de largo alcance de 30 a 15 minutos, lo que significa que los Estados Unidos podrían ser vulnerables a un ataque inesperado con misiles.