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El dia de hoy te vamos a contar la increíble historia de Li Ching Yuen, el hombre que vivió 256 años: Se casó 23 veces y tuvo más de 200 hijos.

Llegar a los 100 años es un gran hito, pero imagina que si alguien viviese hasta los 250 . Parece imposible, ¿verdad?

Desde el principio de la historia, la humanidad dedicó una gran cantidad de tiempo a buscar el secreto de la longevidad. El deseo de vivir eternamente, o al menos más del típico casi un siglo, hacía perder el sueño a muchos investigadores y científicos.

En realidad, hemos dado un gran paso adelante con el desarrollo de la medicina. En la Edad Media tenías suerte si eras capaz de llegar a los 40. Ahora muchos viven más de 70 años y algunos incluso llegan a los 90 o sobrepasan los 100 años de edad.

Sin embargo, un hombre logró encontrar el remedio para vivir muchos más años , que cualquier otro ser humano y es posible que sea la persona con más años que habitó el Planeta.

Un día decidió compartir su historia con todo el mundo , y aquí te la vamos a presentar.

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Li Ching Yuen nació el 3 de mayo de 1677 en Sichuan, China y su historia es una de las más conocidas del mundo por ser el hombre que vivió nada menos que 256 años y tres días, siendo la persona más longeva que haya existido. Sobre su historia es poco lo que se conoce, debido a que no era una persona famosa y siempre estuvo recorriendo todo el país asiático en busca de . Li Ching Yuan recolectaba hierbas medicinales y piedras de colorines.

La historia del asiático la dio a conocer el profesor Wu Chung-Chieh, decano del departamento de educación en la Universidad de Chengdu, quien presentó al New Yok Times registros imperiales de China en los que felicitan dos veces a Li Ching Yuen por sus 150 y 200 años.

La larga vida del hombre se dio a conocer el 6 de mayo de 1933, el día que murió. Para finales de la década de los 20, muchos ancianos del barrio donde residía contaban historias acerca de cómo sus abuelos lo conocieron siendo niños y él seguía pareciendo un adulto.

Sobre su historia es poco lo que se conoce, debido a que no era una persona famosa y siempre estuvo recorriendo todo el país asiático en busca de hierbas medicinales. Li Ching Yuan recolectaba hierbas medicinales y piedras de colorines. Sobre su vida personal es muy poco lo que se sabe, pero según los registros presentados por el medio estadounidense, se casó al menos 23 veces, relaciones con las que tuvo más de 200 hijos.

Desde los 10 años mantenía una dieta a base de hierbas y vino de arroz, régimen alimenticio que sostuvo durante 100 años. Además, consumía ginseng y una planta poco conocida, la Centella asiática .

Li vivió durante décadas en el templo taoísta de Yu Quing del monte Lao Shan, plenamente dedicado al taoísmo y haciendo sus ejercicios espirituales, por lo que a su avanzada edad, siempre fue una persona fuerte y ágil, con capacidad mental envidiable y hasta su voz la mantuvo sonora. También vivió en las montañas del Tíbet y Li tenía como secreto para su larga vida mantener “un corazón tranquilo, siéntate como una tortuga, camina rápido como una paloma, y duerme como un perro”.

Ching Yuen murió en su residencia por causas naturales el 6 de mayo de 1933. El New York Times, quien le dedicó espacio a su historia por años, publicó una esquela en su honor.

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