Las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2024 están en pleno desarrollo, con los primeros resultados proyectados en algunos estados clave. Hasta el momento, el expresidente Donald Trump ha logrado asegurar varios estados republicanos fuertes, incluidos Texas, Florida, Carolina del Sur y Virginia Occidental, sumando cerca de 99 votos electorales. La candidata demócrata, Kamala Harris, se ha impuesto en estados como Maryland, Massachusetts, y Vermont, alcanzando 49 votos electorales, según proyecciones de medios estadounidenses
El mapa electoral indica que los estados denominados «swing states» son nuevamente el campo de batalla decisivo, con lugares como Pensilvania y Michigan mostrando un conteo cerrado y una alta participación. Se estima que estos estados, que no tienen una clara inclinación partidista, podrían definir el resultado final, ya que poseen una gran cantidad de votos electorales que cada candidato necesita para alcanzar los 270 votos requeridos en el Colegio Electoral
Además de la presidencia, se están llevando a cabo elecciones legislativas para la Cámara de Representantes y el Senado, lo que determinará el equilibrio de poder en el Congreso. Actualmente, los republicanos tienen una ligera ventaja en el Senado, pero varios escaños se encuentran en disputa cerrada, lo cual también podría impactar en el apoyo legislativo al próximo presidente
Estos resultados iniciales sugieren una contienda reñida en los próximos días, especialmente en los estados indecisos que definirán quién obtendrá la mayoría en el Colegio Electoral y, con ello, la presidencia de Estados Unidos.
Hasta el momento en las elecciones presidenciales de EE. UU. 2024, el candidato republicano Donald Trump lidera con 230 votos electorales, mientras que la demócrata Kamala Harris cuenta con 205 votos, tras haberse adjudicado los estados de la costa oeste como California, Washington y Oregón. Trump mantiene la delantera en varios estados clave, incluido Carolina del Norte y otros donde las proyecciones apuntan a su favor
El panorama sigue siendo reñido, especialmente en estados como Michigan, Pensilvania y Georgia, donde Harris y Trump están muy cerca en las preferencias. Estas áreas siguen siendo decisivas y podrían inclinar la balanza en cualquier momento.